ENTREVISTA / "LA IGLESIA NO DEBE OPINAR PORQUE NO SE TRATA DE CREENCIAS RELIGIOSAS"

UN BUEN INICIO: ACTIVISTA APOYA PROYECTO DE LEY PARA LA UNIÓN CIVIL
Publicado el domingo 6 de octubre del 2013

POR MAYUMI GARCÍA YRAITA
Para el comunicador digital Antonio Capurro, el proyecto de ley presentado por el parlamentario Carlos Bruce, que propone la unión civil, no matrimonial, entre personas del mismo sexo, es un buen comienzo para que el Perú se ponga a la vanguardia de la igualdad de derechos. "Si no es ahora, ¿cuándo va a estar la sociedad lista para aceptar, tolerar y respetar la diversidad de las personas con una orientación sexual o identidad de género diferente? No estamos pidiendo más ni menos, tan solo que nuestros derechos sean reconocidos", afirma el activista que tiene diez años luchando por hacer respetar sus derechos. Él conversó con La Industria de Chimbote y comentó sobre los beneficios de esta iniciativa legislativa.

¿Cuál es la diferencia entre unión civil y matrimonio homosexual?
El matrimonio de dos personas del mismo sexo u homosexuales permitiría la adopción de un niño. En tanto que la unión civil otorgaría derechos sobre el patrimonio compartido, la herencia y otras situaciones solo relacionadas con el reconocimiento de facultades legales.

¿Es cierto que la aprobación de la unión civil entre personas del mismo sexo es el primer paso para la instauración del matrimonio entre homosexuales?
Yo diría que es el primer para la no discriminación de la comunidad LGTB (Lesbianas, gays, bisexuales, transexuales) en el Perú; recordemos que este sector de ciudadanos está postergado en nuestro país. En ese sentido, hablar de "instauración" me trae a la memoria el discurso de los sectores más conservadores y homofóbicos de la sociedad entre los que está el cardenal Juan Luis Cipriani. No creo que se deba utilizar la palabra "instauración del matrimonio" como convencidos de que se trata de una secta satánica a la que no se puede combatir.

¿Cuáles son los beneficios de que se admita la unión civil entre homosexuales en el Perú?
Los beneficios son muchos: por citar solo algunos, tenemos quienes solo viven con su pareja y se enferman de tal manera que no pueden expresar voluntad, pero que obligatoriamente tienen que someterse a un tratamiento quirúrgico, el conviviente será quien tenga la potestad para autorizar. Así también está el caso de fallecimiento, ante el cual el otro integrante podrá tener habilitación vitalicia y gratuita en la casa que compartieron. Además de la cobertura del seguro social, la pensión de viudez, AFP, invalidez, ONP o régimen mancomunado, según sea el caso. 

¿Hay perjuicios de aprobarse la ley?
Para nada. Mejor un beneficio enorme para quienes conformamos la comunidad LGBT, tantos años hemos sido discriminados en nuestros derechos legítimos como ciudadanos que ya es hora de que el Estado nos reconozca.

¿Qué opinión le merece que algunos afirmen que el Código Civil actual establece mecanismo para que una persona pueda asegurar económicamente a su pareja, sin la necesidad de unirse civilmente?
El Código Civil peruano solo establece condiciones favorables para las parejas heterosexuales. Es una falacia que persona del mismo sexo podamos acceder a estos derechos a través de mecanismo legales establecidos o tipos de contrato. 

Según los detractores de la ley, el Estado tiene como uno de sus fines proteger a la familia, la cual está basada en la capacidad reproductora. Dos personas del mismo sexo no podrían lograrlo.
Es importante aclarar que el propósito de un matrimonio no radica solo en la reproducción, sino también en la convivencia. Ahora, cuando se dice que el Estado protege a la familia, debemos tener en cuenta que existen diversas clases de familia, tenemos a los hogares formados por abuelitos y nietos, niños que fueron criados por sus tíos, entre otros casos, que aún dándose diferentes condiciones, son familias. Es aquí donde estamos los de la comunidad LGBTQ, quienes perfectamente podemos integrar lo que se denomina la familia homoparental. El término familia se debería ampliar a personas del mismo sexo.

Con respecto a la adopción que pueden realizar dos personas del mismo sexo, se aduce que un menor que crece en este entorno vive confundido y tendrá problemas para definir su sexualidad, ¿qué opina de ello?
Hay estudios científicos que aseguran que los niños criados dentro de una familia homoparental se desarrollan normalmente en un entorno de amor y cariño. También dicen que los hijos de dos personas del mismo sexo no tienen la orientación sexual gay o lésbica de sus padres, según fuera la situación; por el contrario, asumiría la presencia de dos papás o dos mamás, envueltos en un mundo de relación con tíos, primos y sobrinos.

¿Las personas de las comunidad LGBTQ cómo observan el papel de la iglesia frente a esta polémica?
La iglesia no debe participar de la polémica porque aquí no estamos hablando de creencias religiosas, sino de derechos civiles. Dicen que somos un estado laico, pero pareciera que no pues hay injerencias que solo buscan la discriminación. La iglesia puede puede argumentar lo que quieran con sus feligreses, siempre y cuando tenga claro sus límites. No hay que pretender que en un país que se supone democrático y en el que su constitución establece claramente que nadie puede ser discriminado por su raza, religión o cualquier otra índole existan ciudadanos de "segunda categoría".

¿Por qué cree que en el Perú en comparación a otros países se resiste a visibilizar la unión civil entre personas del mismo sexo?
Considero que es parte de la ignorancia, el desconocimiento, además del miedo a lo diferente. Soy consciente que hemos crecido, incluso yo, en medio de una sociedad machista y homofóbica que tiene predisposición al rechazo de lo que no es igual. El sistema educativo, los patrones culturales, la familia y el entorno fueron formados con principios muy ligados a la religión, incluso, los medios de comunicación crearon estereotipos y manejaron un periodismo no diverso. Es a partir del siglo XXI que la nueva generación otorga un enfoque mucho más amplio para tratar los temas bajo la perspectiva de la igualdad de derechos.

A su parecer, ¿el Perú como sociedad aceptaría que dos personas del mismo sexo puedan convivir y desarrollar derechos civiles de una pareja heterosexual?
El Perú como toda sociedad debería tener una tendencia al evolucionar de forma democrática y abierta, pero lo cierto es que nos estamos quedando relegados. Hay países como Colombia, Brasil, Argentina, Uruguay y Ecuador que aceptaron esta realidad; sin embargo, nuestro país todavía está en busca del camino. Nosotros, los de la comunidad LGBTQ, quisiéramos que en el 2014 el Congreso apruebe esta ley.

¿Qué siente un integrante de la comunidad LGBTQ de que en su país no se den las condiciones para una convivencia digna?
En una opinión muy particular, me siento indignado de que se nos califique como ciudadanos de segunda categoría cuando somos personas que aportamos al desarrollo de nuestra comunidad y país. Cumplimos con nuestros deberes, pero estamos sin derechos en un país legislado por heterosexuales.

En opinión de un psicólogo, la sociedad peruana no está preparada para aceptar uniones de este tipo y pretender forzar las cosas podría desencadenar agresiones homofóbicas en mayor nivel, ¿coincide con esta apreciación?
Debemos tener claro que la homofobia esta ahí y no se irá; sin embargo, el proceso de cambio debe de iniciarse. Estoy seguro que va a llegar el momento en que tendremos las condiciones adecuadas, de mano de la educación, para lograr salir del retraso y ponernos a la vanguardia de la igualdad de derechos.

Usted tiene una pareja del mismo sexo, ¿ha pensado en formalizar su relación a través del matrimonio?
Claro. Crecí dentro de una familia en la que mi padre y mi madre se casaron civilmente y yo anhelo lo mismo. Tengo una relación de pareja con una persona con la que estoy cuatro meses y el deseo de ambos es casarnos en un futuro: deseamos que nuestra unión sea reconocida por la sociedad, con una fiesta y con toda la celebración que amerita un hecho de este tipo. Así también ansiamos tener hijos a través de la maternidad subrogada o adoptar. 

Como integrante de la población LGBTQ que tiene una pareja del mismo sexo ¿qué dificultades enfrentó y continua enfrentando?
En mi caso hace diez años le dije a mi familia que era gay y lo aceptaron, pero en otros, la situación es diferente. Hay quienes no aceptan que un familiar sea "diferente" y se alejan de él o ella. Incluso hay casos en los que los parientes permanecen distanciados del homosexual o lesbiana hasta que se muere, ahí aparecen para despojar de todo a la pareja que acompañó al desaparecido.  En el mismo entorno laboral, un integrante de la comunidad LGBTQ tiene miedo que sepan su orientación sexual porque siente que lo despedirán. Hace poco estuve por  Miraflores con mi novio y le cogí de la mano, nadie nos dijo nada, pero él tenía miedo de que nos insulten. Esas reacciones son consecuencia de la homofobia que hay en nuestro país.