Crónica de una maestría anunciada III: NO QUIERO GRADUARME DE TESISTA

El mayor miedo de un graduando de maestría, aquella persona que está en proceso de obtenerlo, es el graduarse de tesista, es decir, estar muchos años a punto de obtener la maestría y no terminarla nunca, algo que suena como una pesadilla. Y esto sucede porque en el camino se te presentan obstáculos de la vida misma, de tus prioridades, de la falta de motivación, pero uno de ellos puede ser desde la misma universidad, dependiendo si estás en una pública o privada, cuando van demasiado lento en sus procesos. Se piensa que estar en lo privado todo es más rápido, aunque tampoco esto sea una garantía. 

Es muchísimo mejor cuando tienes en claro el tema de la asesoría, si estás en una pública ellos te asignan un asesor quien va a guiarte desde el proyecto de tesis todo en forma libre; del otro lado, en algunas universidades privadas te dan el mínimo detalle de lo que cuesta todo. Pero en la asesoría ya sea que pagues o no, lo importante es que cumplas con los avances y establezcas un calendario o cronograma real con plazas que vas a cumplir. Después de ocho años yo no deseo esperar más, así que me he propuesto que debe estar listo en noviembre 2025.