EN MEMORIA DE MARK BINGHAM

En el año 2001 escribí un artículo titulado Héroe para nosotros: Mark Bingham, un joven gay contra los secuestradores, bajo el seudónimo de Jimmy Hitch. Recuerdo que unos días después del atentado contra las torres gemelas buscando información para Lima Gay, la sección que tenia a mi cargo, encontré la historia de Mark Bingham, uno de los pasajeros del vuelo 93 de United Airlines, quien trató junto a otros de enfrentar a los terroristas de Al Qaeda, pero ya sabemos que no tuvieron éxito lamentablemente.

Mark tenía un año más que yo, en el año 2001 a los treinta y un años, mientras él se dedicaba a las relaciones públicas, yo ejercía a los treinta el periodismo escribiendo en un portal web limeño. Era un emprendedor que había logrado después de la universidad, fundar su propia firma de relaciones públicas, The Bingham Group, con oficinas en San Francisco y Nueva York, yo era un periodista trabajando en forma dependiente para un medio digital. 

Había nacido en el estado de Arizona en Phoenix pero vivía en San Francisco; yo en el la Región Ancash, en el puerto pesquero de Chimbote. A Mark le gustaba el deporte no sólo para mantenerse en forma sino como una forma de agruparse y lo hizo a través de un deporte que amaba, el rugby. En la Universidad de California, Berkley, fue una estrella de ese deporte. Además su participación se hizo fundamental para la creación de dos clubs de rugby donde los jugadores podían sentirse incluidos siendo quienes como el San Francisco Fog RFC y el Gotham Knights RFC en la ciudad de Nueva York. En honor a Mark los Gotham Nights RFC crearon The Bingham Cup. Yo sólo conocía del rugby por las Olimpiadas y me encantaba ver a esos hombres fuertes y macizos empujándose unos a otros.

¿Dónde se configura el legado de Mark Bingham? Haber sido un hombre visiblemente gay en un tiempo donde sólo existían seis clubes gay de rugby en todo el mundo. Ahora son cerca de 60. 

En un email a The Fog, luego de su aceptación en la unión local Mark Bingham escribió: "Nosotros tenemos la oportunidad de ser ejemplo para otros hermanos gay que desean jugar deporte, pero nunca se sintieron bastante buenos. Más importante, tenemos la oportunidad de mostrar a los otros equipos de la liga que nosotros somos tan buenos como ellos. Buenos jugadores de rugby. Buenos fiesteros. Buenos deportistas. Buenos hombres".